Bien pues vengo a comentaros cómo es el trabajo de MAESTRO.Muchos son los que dicen que ser maestro es un chollo, que tienen muchísimas vacaciones, que hasta inventan días como el del maestro por ejemplo o el del profesor.Que se sientan y ahí se las den todas...Siento deciros que no es oro todo lo que reluce.
Para ser maestro hay que tener vocación.No a todos les gustan los niños,no todos pueden ganárselos y no todos tienen paciencia para aguantar a un grupo de niños dando voces, revoloteando por la clase, levantándose cada pocos minutos, interrumpiendo todo el tiempo para contar por ejemplo que su tío una vez quemó un nido de pájaros.. ¡NO!Está claro que no todo el mundo podría ser maestro.
Y me río yo de aquellos incrédulos que dicen que la carrera de magisterio la hacen los tontos...Estoy de acuerdo que es más fácil que una ingeniería,sí,pero os aseguro que no es ni parecido el cansancio de un maestro al cansancio de un ingeniero al terminar su jornada de trabajo.Los niños agotan.
Para todos aquellos que digan que nos quejamos de vicio, yo les invito a que pasen un mes en el pellejo del maestro y luego hablen, porque yo era de las personas que lo decía.Hasta que me ha tocado vivirlo.
No voy a negar que me encanta ir a clase y enseñar a los niños,estaría mintiendo.Estoy encantada con esta experiencia y por supuesto me dará pena que se termine.Pero es agotador, os lo puedo asegurar.Y sobre todo cuando los alumnos no te ven como una autoridad.Es horroroso estar todo el tiempo mandando callar y que no te hagan caso, y que en medio de todo el bullicio tengas a 10 niños haciendo cola para decirte es que me duele la cabeza, es que me duele la barriga...
Pero...¿sabéis lo que os digo?Que con todos los inconvenientes y sobre todo con todas las ventajas no cambiaría el ser maestro por ninguna ingeniería.Porque prefiero tratar todos los días de mi vida con pequeños monstruitos a tratar con máquinas!
